El 22 de mayo Wagner cumple doscientos años. El acontecimiento se presta a tentaciones que pueden pagarse caro; por ejemplo, arriesgarse a recomendar las mejores versiones de sus óperas – mejor dicho, “dramas musicales” así donde quiera que esté, Don Ricardo no patalea – con el riesgo de incurrir en el típico agradecimiento del premiado que olvida mencionar a quien más lo merece.
La idea de confeccionar “otra inservible lista” se origina en el espléndido dossier Wagner, publicado semanas atrás por el diario El País de Madrid donde un crítico hizo una respetable selección que causó escozor entre las huestes wagnerianas, ni qué decir entre sus colegas. Para seguir echando leña al fuego, Miami Clásica añade sus selecciones estrictamente ceñidas a los diez títulos del tradicional “canon wagneriano” que excluye la obra temprana pero al que suma las Wesendonck Lieder.
La profusión de registros hace la tarea más apasionante y…
Ver la entrada original 1.644 palabras más